Rumbo al sin sentido...

Los días transcurren más lentos a pesar de que ahora en invierno el Sol se desvanece antes haciendo la Luna pronto acto de presecia, pero aún así...y con menos razón posiblemente, todo carece de sentido.
El amanecer es un elemento más de mi rutina a lo que apenas presto atención.
El sueño se hace protagonista de la situación y se descontrola interminablemente más cada día sumiendome en un subsconsciente turbio y plagado de pesadillas agónicas. Ya ni siquiera durmiendo encuentro la paz.
....Antaño, no hace mucho tiempo deseaba dormír para olvidar y creía que así podía dejar de pensar, pero me equivocaba.
Mi inconsciente me atormenta ahora con mis inquietudes de la vida real.
Desde entonces postergo tanto el sueño que las noches son mis días y los días mis noches.
Vivo al revés del mundo y el mundo al revés de mí. Hace tiempo que fuí consciente que giraba en mi contra, así que, qué más da si todo deja de tener sentido...

Quizás, con suerte...algún día el sentido venga a por mi y me rescate de esta locura.